lunes, 19 de abril de 2010

Historia de la Mitología Nórdica XIII: La muerte de Bald

Queridos seguidores de Hyperborea Existe, de nuevo me dirijo a vosotros para seguir con el penúltimo capítulo de Historia de la mitología nórdica. Hoy nos centraremos en el relato de la muerte de Bald, sin duda uno de los más tristes de la Gylfaginning de Snorri Sturluson.

Este relato tiene como protagonista a Baldr, el más bello de los dioses e hijo de Odín y su esposa Frigg. Baldr tiene sueños premonitorios de su muerte. Los dioses deciden protegerlo, y obligan a todas las cosas del mundo a prometer que no le harán daño. Durante las reuniones de los dioses, éstos se divierten golpeándole o lanzándole cosas a sabiendas de que no resultará herido. Loki, celoso de la inmunidad de Baldr, visita a Frigg disfrazado de mujer y, durante la charla, a Frigg se le escapa que el muérdago ha sido dispensado de formular la promesa de no dañar a Baldr debido a su juventud. Loki regresa a su forma natural, arranca un poco de muérdago y lo lleva a la reunión donde están acribillando a Baldr.

El hermano ciego de Baldr, Hod, se encuentra cerca y Loki lo anima a que se una a la diversión general. Le coloca el muérdago en la mano y dirige el tiro en dirección a Baldr. Hos se lo lanza a su hermano y éste fallece. Los dioses enmudecen de horror. Odín, el padre de Baldr, queda especialmente desconsolado. Frigg pregunta quién acudirá a Hel para ofrecer un rescate por la liberación de Baldr. Hermod, otro de los hermanos de Baldr, se ofrece. Odín le presta su caballo, Sleipnir, y Hermod se pone en camino.

Colgante de un juego de dos, que representa a Baldr a caballo, Suecia. Existen multitud de interpretaciones sobre la intervención de Loki en la muerte de Baldr. Algunos sugieren que los dioses, tratando de librar a Baldr de la muerte, perturban el orden natural de las cosas: todo debe morir, como demuestran las acciones de Loki.
Se prepara un suntuoso funeral por Baldr. Llevan su cuerpo a la orilla del mar, y arrastran su gran barco, Hringhorni, hasta la playa. Sin embargo, no consiguen devolverlo al mar, por lo que llaman a una giganta, Hyrrokkin, de la tierra de los gigantes, quien llega a lomos de un lobo y a modo de riendas usa víboras. Se necesitan cuatro guerreros de Odín para contener al lobo cuando la giganta desmonta.

Hyrrokkin bota el barco con un simple empujón; los rodillos echan chispas y el suelo se estremece. Thor, siempre dispuesto a matar gigantes, monta en cólera y la amenaza con su martillo, pero los otros dioses le ruegan que le perdone la vida. Colocan el cuerpo de Baldr en el barco botado junto al de su esposa Nanna, quien ha muerto de pesar. Encienden la pira funeraria y Thor la bendice con su martillo, Miolnir. Un enano corre hasta sus pies y Thor, irritado, lo arroja de una patada a las llamas, en las que muere. Todos los dioses y muchos gigantes de las montañas y escarcha acuden al funeral. Odín coloca el anillo Draupnir en la pira junto con el caballo de Baldr, que también arde con los arreos.

La traición de Loki

Hermod, mientras tanto, cabalga durante nueve noches a través de profundos y oscuros valles hasta que llega al puente sobre Gioll, el río de la muerte. Modgud, la doncella que custodia el puente, le dice que no parece un muerto y que Baldr lo ha cruzado hace poco. le indica que se dirija hacia Hel, abajo y al norte. al llegar a las puertas de Hel, Hermod las salva de un salto a lomos de Sleipnir. Llega a un salón, desmonta, entra y encuentra a Baldr ocupando un lugar de honor. Hermod describe a la diosa Hel el pesar de los dioses y le ruega que permita a Baldr regresar con ellos. Hel accede, con la condición de que todo en el mundo llore por Baldr. Hermod regresa a Asgard inmediatamente llevando regalos de Baldr para sus padres: el anillo Draupnir para Odín y una túnica para Frigg.

Por todo el mundo se hace correr el mensaje de que se ha de llorar a Baldr para que éste pueda salir de Hel. Todas las personas y cosas así lo hacen, con una excepción. Una giganta, que suele asumirse que es Loki disfrazado, se niega a llorarle, así que Baldr debe permanecer en Hel. Encuentran a Loki oculto en una cueva, donde se le obliga a permanecer encadenado hasta el Ragnarök.

Loki castigado, de J. D. Penrose. Por sus fechorías, se ata a Loki a unas rocas debajo de una serpiente. A menudo se representa a su mujer junto a él recogiendo el veneno en un cuenco. Cuando éste se llena, tiene que verterlo y el veneno cae sobre Loki.
Este mito es una muestra más del carácter traicionero de Loki, aunque tal vez sea más significativo por presentar a un Cristo pagano que muere, pero que no resucita. La inversión obvia del mito cristiano es una clara muestra de la influencia en el autor de la religión que al final sustituyó al paganismo en Escandinavia.

Con este relato ya solo queda uno más para finalizar esta etapa de Hyperborea Existe, el relato de Beowulf, que muchos conoceréis seguramente por las dos adaptaciones al cine que ha habido. Quiero agradeceros a todos el apoyo mostrado y pediros disculpas por haber espaciado las actualizaciones del blog, pero está siendo una época muy frenética de trabajo y no doy abasto, pero tranquilos que voy a seguir manteniendo vivo Hyperborea Existe.

Nota. Parte de la información de esta serie de capítulos podréis encontrarla en el libro Mythology: Myths, Legends and Fantasies de Global Book Publishing, una gran obra para introduciros en la mitología en general de las culturas de todo el mundo.

5 comentarios:

  1. Una historia triste pero fiel reflejo de la influencia del momento como bien apunta el autor.

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  2. La historia de Baldr siempre fue una de mis favoritas desde que de niño leí sobre la mitología nórdica. La figura de Loki también es una de las que más me llama la atención. Siga así con el blog!

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  3. Acabo de descubrir esta página y por ende su blog y debo decir que me ha encantado, hoy en dia, cuesta encontrar blogs dedicados a estos temas que huyan de las supercherías e intenten ser serios. Enhorabuena.

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  4. A ver, se supone que si hacen prometer a todas las cosas que no dañarán a Baldr, quiere decir que nada lo puede herir, y por tanto, causar dolor. Ahora bien, entonces como se divertían al lanzarle cosas y tratar de herirlo? Esa es quizás la duda más importante que se podría plantear en este tema en concreto.

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  5. La figura de Baldr, es sin duda una de las más interesantes de la mitología nórdica por su relación con la imagen de cristo en las religiones católicas.

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